¡Insólito! Invasión de abejas en juego de tenis en Indian Wells; Carlos Alcaraz es atacado

L as imágenes televisivas mostraron que la cámara que se desplaza a lo alto de la pista, conocida como 'spidercam', era lo que atraía a las abejas.

El tenista español Carlos Alcaraz durante la invasión de abejas en Indian Wells. | Screenshot
El tenista español Carlos Alcaraz durante la invasión de abejas en Indian Wells. | Screenshot

Una auténtica invasión de abejas fue la que sufrió la pista central de Indian Wells, en el juego de Cuartos de Final entre el número 2 del mundo, el español Carlos Alcaraz, y el alemán Alexander Zverev, mismo que tuvo que suspenderse debido a la ‘nube’ de insectos que impidió que el match pudiera continuar.

Justo cuando el juego se encontraba con el marcador 1-1, decenas de abejas aparecieron en el court de Indian Wells, obligando al juez de silla a detener el cotejo, pues era imposible que se pudiera tener acción, ya que incluso el Alcaraz fue atacado, por lo que tuvo que salir corriendo rumbo al vestuario.

Las imágenes televisivas mostraron que la cámara que se desplaza a lo alto de la pista, conocida como 'spidercam', era lo que atraía a las abejas, que intentaron hacer ahí su panal, en un hecho sumamente insólito.


El partido se suspendió casi dos horas, pues tuvo que ser llamado un apicultor para que pudiera retirar el recién formado panal y que las abejas no sufrieran ningún daño.

El juego se reanudó tras ese par de horas y Carlos Alcaraz se impuso a Alexander Zverev por 6-3 y 6-1 en una hora y 29 minutos de juego. El español se llevó la victoria, al igual que unos cuantos piquetes de las abejas.

En México ya ocurrió, en el Estadio Azteca

Una situación similar a la de Indian Wells se vivió en México, específicamente en el Estadio Azteca, durante un partido de eliminatoria mundialista rumbo a Sudáfrica.


En ese entonces, La Selección Mexicana de Futbol se enfrentaba a su similar de El Salvador y en pleno partido, centenares de abejas se posaron en una de las porterías del Coloso de Santa Úrsula e incluso en los micrófonos del sonido ambiente. Después de un largo rato, fueron controladas.

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